Fortaleciendo la esperanza

0
655
Hidalgo.- Precisamente a un lado del muro fronterizo que ya existe en esta población, el alcalde de Hidalgo, Sergio Coronado, destacó la importancia de la jornada promovida por Caridades Católicas, frente a los ciclistas y caminantes encabezados por la Hermana Norma Pimentel.

Por José Luis BGarza

Pese a los fuertes vientos e intensa lluvia que momentáneamente se registraron por la mañana del domingo, los entusiastas participantes de la Ruta de la Esperanza, recorrido ciclista de Hidalgo a McAllen, organizada por Caridades Católicas, no permitieron que decayera su ánimo y tal como estaba programado, cumplieron con su objetivo: crear conciencia de la necesidad de ayudar a migrantes desvalidos.
El punto de reunión de integrantes de Caridades Católicas del Valle del Río Grande, voluntarios, activistas y líderes locales fue el Museo y Centro Mundial de Observación de Aves “Old Hidalgo Pump House”, de la ciudad de Hidalgo, para hacer una caminata y un recorrido en bicicleta, rumbo a la iglesia católica del Sagrado Corazón en la ciudad de McAllen.


La señal de arranque fue dada precisamente a un lado del muro fronterizo que existe en esta área, donde previamente a la salida de los contingentes el alcalde de Hidalgo, Sergio Coronado, destacó la importancia de la jornada que ahí se inició.
Se contó con la coordinación de los servicios de las fuerzas policiacas de las ciudades de Hidalgo, Mission y McAllen. En un momento del recorrido ciclista la fuerte lluvia impidió que concluyeran el recorrido como estaba previsto y entraron en auxilio tranvías para asistir a los participantes transportándolos hasta la iglesia para cumplir con la jornada programada.


“Este evento lo hacemos por tercera ocasión consecutiva para promover y crear conciencia de la realidad de tantas familias vulnerables y con necesidad, que entran aquí por nuestra frontera y solicitan nuestro apoyo. Lo que se recaude de este evento es para ayudar a las familias refugiadas en el edificio asignado como albergue, así como para la construcción de un centro de ayuda humanitaria permanente”, dijo la hermana Norma Pimentel, Directora de Caridades Católicas del RGV.
Después de la tempestad llegó la calma y junto con ella una celebración soleada para todos los participantes y sus familias en la línea de meta, ubicada en el sitio del futuro centro de asistencia humanitaria en la esquina de Chicago Street y calle 16 en el centro de la ciudad de McAllen, que incluyó comida cortesía de Bert Ogden Grillers para todos los participantes, refrescos y alegre música por parte de Hermes Music.