Miami, (EFE).- La estadounidense Ally Brooke ha pasado por una especie alquimia artística: desarmó sus inicios y sus experiencias en Fifth Harmony, se deshizo de su nombre artístico y este viernes estrena “Mi música”, el primer tema en español de, simplemente, Ally.
“Ahí está mi esencia por primera vez”, dijo Ally a Efe, en el inglés con el que fue criada en Texas y salpicando en la conversación el español de sus abuelos mexicanos.
Su exuberancia natural apenas baja un poco cuando el anhelo de ser bien recibida por sus fans se mezcla con inseguridad.
“Encontrar mi sonido y mi idioma musical fue un proceso largo, en el que además se metió la pandemia, que fue algo difícil, pero al final productivo”, explicó la cantante, de nombre Ally Broke Hernández.
Eso no quiere decir que haya estado fuera del mercado desde 2018, cuando Fifth Harmony entró en modo de pausa, y “All Night”, con Afrojack, fue su primer número uno como solista en 2020.
Y ahora finalmente decidió hacer música en español.
“Aunque no lo hablo bien, debido a toda la discriminación que sufrieron mis abuelos cuando llegaron a Estados Unidos y mis papás cuando estaban creciendo, es el idioma de mi corazón. En él cantan los artistas que he escuchado desde mi infancia, para mí el español es el lenguaje de mi alma”, destacó.
Selena Quintanilla, Jennifer López y Shakira son los primeros nombres que menciona cuando habla de sus ídolos. No parece casualidad que las dos primeras cantaron en español antes de hablarlo. “Nunca había pensado en eso”, admitió, pero se identifica aun más con las dos.
“Estamos viviendo en una época en la que los artistas tenemos libertad de expresarnos como queramos. Una época que valora la autenticidad y me siento agradecida. Cuando Selena y J.Lo empezaron no era fácil que una mujer latina se destacara en la música, menos en el idioma de su familia”, indicó.
Por esa puerta pasaron también sus ex compañeras de Fifth Harmony como Camila Cabello y Lauren Jáuregui, a las que describe como “muy talentosas”, aunque se alegra de poder ser solista, porque “cuando uno está en un grupo hay que hacer muchas concesiones”.
La esencia que Ally muestra en “Mi música” es pop, con base urbana, pero más lenta de lo tradicional y un trabajo de estudio sofisticado. Su voz le da un toque inconfundible, aunque mantiene la estructura de una estrofa-coro y repeticiones.
Aunque cantar en español no le significó un reto porque le salía “natural”, sí lo está siendo tratar de hablarlo en las entrevistas. “Sabía que iba a pasar por esto y lo celebro. Estoy en un proceso de desafiarme a mí misma y enfrentarme a lo que me da miedo”, confiesa.
Un ejemplo fue su participación en la versión estadounidense de “Dancing With the Stars”. “Yo siempre era la que peor bailaba en Fifth Harmony”, reconoció. Además publicó su libro “Finding Your Harmony” y su participación en el programa de dibujos animados de Nickelodeon “The Casagrandes”.
