Miami, (EFE).- Nacho cierra 2021 haciendo un balance de su vida y su carrera. Las cuentas le salen bien, pero no lo habría logrado sin lecciones “dolorosas e intercambios con las nuevas generaciones de artistas”, en un “aprendizaje” que le llevó a su más reciente sencillo.
Se trata de “La mitad”, una colaboración con los colombianos Carlos Vives y Mike Bahía que representa una de las principales clases que la vida le ha dado a Nacho en los últimos tiempos.
“Si uno valora una relación hay que hacer el esfuerzo por encontrarse en el medio, o en la mitad, como dice la canción”, explicó el artista.
Para los artistas, la colaboración se convirtió en la “herramienta perfecta” para mandar un mensaje “positivo y constructivo” a su público.
Nacho habría querido “aprender esa lección más temprano”. Aunque declinó entrar en las anécdotas de momentos en los que le habría sido útil saber ceder en desacuerdos, sí reconoció que hoy en día no lo ve como “ceder o perder”, sino una forma de ganar.
“En la vida siempre hay cambios, pocos han sido tan impactantes en mí como las cosas que he vivido recientemente, además de la pandemia, claro”, confesó Nacho.
En la lista de esas cosas están incluidas la enfermedad de Jesús Miranda, su compañero en el dúo Chyno y Nacho, y la experiencia de ser parte de la edición de “La Voz” en la República Dominicana.
Miranda contrajo la covid-19 en marzo de 2020 y desde entonces ha padecido de complicaciones neurológicas, que incluyen una neuropatía periférica que le dejó paralítico y una encefalitis que le ha dejado discapacitado, con dificultades cognitivas, de lenguaje y control de las extremidades.
Para Nacho, antes vino en 2019 la separación de su pareja durante 10 años, Inger Devera, madre de tres de sus cinco hijos, y en el año pasado nació Mya, la única niña del artista, producto de su relación con la modelo venezolana Melany Mille.
EL SELLO DE CALIDAD
Para Nacho, “La mitad” también tiene un importante significado en lo profesional. “El tema lo escribimos durante un taller de composición y es uno de los que más me representa”, subrayó el artista de 38 años.
El que Vives, ganador de dos premios Grammy y catorce Latin Grammy, aceptara grabar este tema con él y con Mike Bahía es “un verdadero honor” y lo considera una especie de inducción en el selecto grupo de artistas latinos que han dejado un legado. “Es como un sello de aprobación”, bromeó.
En ese sentido, siente que el tener una canción con el referente mundial del ballenato y la cumbia es una señal de que “va por buen camino”.
Por su parte, el venezolano emigrado a Miami transita por expresiones musicales representativas de quién es como artista, las cosas que le mueven, los talentos que descubre y que disfruta.
Otra muestra de ello fue “Low”, una canción que sacó en febrero de este año, que compuso e interpretó con sus compatriotas Neel y Marval.
O también “Saco de boxeo”, su colaboración con Arcángel contra las relaciones tóxicas, y “La buena”, una canción de amor que en el remix contó con las voces de Yandel y Zion.
PROYECTOS DE FUTURO
Una vez que complete sus compromisos con el concurso televisivo “La Voz” en la República Dominicana, Nacho piensa dedicarse a la familia y a su próximo disco.
Si a finales del año pasado lanzó un EP de seis canciones, su plan para 2022 es sacar un álbum completo, y también le gustaría retomar los planes de una gira de Chyno y Nacho, pero eso no depende de él.
“En realidad no depende de nadie, sino de cómo siga mejorando mi compañero. Él sigue trabajando en su recuperación, pero en cuanto pueda, estaré dispuesto”, aseguró.
