Suprema Corte rechaza discriminación en mapa electoral de Texas

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Dallas, (Notimex).- La Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos rechazó que la legislatura liderada por republicanos en Texas haya discriminado intencionalmente a los votantes hispanos y afroamericanos cuando diseñaron los mapas de los distritos electorales de la entidad.

En una decisión dividida 5-4, los magistrados del supremo tribunal desecharon un fallo de una Corte inferior que había encontrado que los legisladores socavaron intencionalmente el poder de voto de los votantes hispanos y afroamericanos, a menudo para facilitar la elección de candidatos anglosajones.

La Suprema Corte consideró que la evidencia era “claramente insuficiente” para demostrar que la Legislatura de 2013 actuó de “mala fe”.

El fallo deja vigente gran parte del mapa político de Texas para las elecciones de mitad de período de 2018, defendiendo, por ahora, los límites políticos que han estado bajo revisión judicial durante casi una década.

La Suprema Corte dictaminó que todos menos uno de los 11 distritos que habían sido señalados como problemáticos podrían permanecer intactos.

La única excepción fue el Distrito Electoral 90 para la Cámara de Representantes de Texas, con sede en Fort Worth, que se consideró hubo ahí una inadmisible manipulación de los límites de la circunscripción electoral con fines raciales, porque los legisladores utilizaron ilegalmente la raza como factor predominante para decidir sus límites.

El fallo del máximo tribunal del país, que mantiene intactos todos menos uno de los distritos políticos estatales hasta finales de la década, es un duro golpe para los que criticaron el diseño de los distritos argumentando manipulación, incluyendo grupos de derechos civiles, votantes de minorías y legisladores demócratas.

Una amplia coalición de grupos de derechos afroamericanos y latinos argumentaron el caso ante la Suprema Corte en abril pasado.

Esto, en su último esfuerzo en una prolongada disputa por la distribución de distritos electorales al sostener que legisladores republicanos de Texas diseñaron de manera intencional sus últimos mapas políticos para marginar a los votantes de las minorías.

Entre los grupos que presentaron el desafío están la Asociación Nacional para el Avance de la Gente de Color (NAACP de Texas) y el Caucus Legislativo México-Americano (MALC).

Estos sostienen que aún cuando la mayoría del crecimiento poblacional en Texas entre 2000 y 2010 fue en comunidades hispanas y afroamericanas, éstas perdieron representación en la redistribución de distritos que siguieron al censo de 2010.

La decisión de la Suprema Corte es lo último en una batalla de siete años para determinar si Texas tiene que volver a trazar sus mapas de distritos electorales para futuras elecciones.