Tucson (AZ), (EFE News).- El gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, culpó a la política migratoria del presidente, Joe Biden, del aumento en la incautación de fentanilo en su estado y en el resto de la región fronteriza con México.
“Vemos que las políticas migratorias de la Administración Biden están teniendo terribles consecuencias”, dijo Abbott durante una conferencia de prensa.
De acuerdo a cifras oficiales de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), durante los primeros cuatro meses de 2021 se decomisaron 2.098 libras de fentanilo a lo largo de la frontera con México, lo que representa un incremento del 233 % comparado al mismo periodo de 2020.
Solamente dos miligramos de esta droga sintética es considerada una dosis “letal” y una libra de este analgésico sintético, 50 veces más potente que la heroína, puede matar hasta 226.746 personas.
Abbott destacó que el fentanilo decomisado este año en la frontera podría ser suficiente para “matar” a cada residente de Nueva York.
Una de las primeras medidas de Biden tras asumir la Presidencia el pasado mes de enero fue detener la construcción del muro fronterizo impulsado por su predecesor, Donald Trump.
Políticos republicanos como Abbott consideran que esta y otras medidas han sido la causa del incremento en el flujo de extranjeros que han llegado a la frontera, provocando una crisis migratoria.
El gobernador indicó que los carteles mexicanos están aprovechando el incremento en cruce de familias y de menores no acompañados para cruzar más droga hacia los Estados Unidos.
“Mientras los agentes de la Patrulla Fronteriza están ocupados procesando grandes grupos se crean brechas que son aprovechadas por los carteles mexicanos”, dijo.
Para combatir este problema, Abbott anunció una nueva ofensiva estatal en contra de la distribución y manufacturación de fentanilo, incluidas mayores penas para los narcotraficantes.
El aumento en el flujo de fentanilo en las calles también ha comenzado a tener mortales consecuencias, y en el condado de Tarrant se han presentando 60 muertes que podrían estar relacionados con el consumo de esta droga en lo que va de año.
El incremento en el flujo de drogas a través de la frontera es un problema que, de acuerdo al gobernador de Texas, está afectando a todos los estados fronterizos, pero también al resto del país, ya que la frontera es solo el punto de entrada de esta droga que termina en las calles de regiones del interior.
