Washington, (EFE).- El sindicato estadounidense United Auto Workers (UAW) anunció este lunes que en las últimas semanas 10.000 trabajadores de fabricantes de automóviles que no están sindicados han firmado formularios para unirse a la organización.
El aumento de la popularidad de UAW entre los trabajadores de fabricantes como Volkswagen, Mercedes-Benz, Toyota o Tesla se produce después de que el sindicato protagonizase una huelga de seis semanas en General Motors (GM), Ford y Stellantis para mejorar las condiciones salariales de sus afiliados.
La huelga concluyó a finales de octubre con aumentos salariales del 25 %, así como otras mejoras económicas y laborales para los empleados de los llamados Tres Grandes de Detroit.
El presidente de UAW, Shawn Fain, declaró en un comunicado que el éxito de la huelga ha despertado el interés de quienes trabajan en el sector del automóvil, más allá de GM, Ford y Stellantis.
“Estos trabajadores están luchando por sus familias y sus comunidades y nuestro sindicato les respaldará en todo momento”, añadió.
De acuerdo a la legislación laboral estadounidense, los trabajadores sólo pueden sindicarse después de que hasta un 70 % de la plantilla de un centro de trabajo firmen formularios para unirse a un sindicato.
Cuando se alcanza esa cifra se celebra una votación entre todos los empleados para aprobar la sindicación. Posteriormente, la empresa debe reconocer el resultado.
Actualmente sólo hay centros de trabajo de GM, Ford y Stellantis sindicados y pertenecientes a UAW en Estados Unidos.
Hasta el momento el proceso de sindicación está más avanzado en la única planta de montaje de VW en Estados Unidos, situada en la localidad de Chattanooga, y la de Mercedes-Benz en Vance, donde varios miles de trabajadores han iniciado el proceso para unirse a UAW.